terciopelo de palabras nunca dichas
suavidades de caricias nunca dadas
arrullos de amor que aún te debo
alegrías sin fin en cada abrazo
en cada beso nuevo un universo
descubierto recién desde tu fuego
asombrosa maravilla cotidiana
del amor en silencio  y a distancia
te pienso ajeno
lejano
y me enloquezco
fue difícil soportarlo en otro tiempo
pero ahora es imposible y yo no puedo
decidirme a olvidarte y aborrezco
la virtuosa renuncia  
el absurdo sacrificio
que antepuso deberes a deseos
que nos arrojó a la angustia y a la espera
y nos hizo amarnos a destiempo.
E.D./97
bonito, si, hay cosas que una vez no dichas, no se dicen nunca mas
ResponderEliminarun abrazo coterraneo
Gracias por tu comentario, y por leer mis cosas. No lo había visto, hace tiempo que no ando por acá. Un abrazo grande.
Eliminar